jueves, 10 de diciembre de 2009

Pato a la naranja

Una fría mañana de enero, domingo.

Había comenzado la temporada de caza y nuestro amigo el pato se preparaba para disfrutar de su hobbie favorito. Esperaba la señal escondido detrás de unos matorrales y esta apareció: "hoooombre".

Del cañón del circo de los Hemanos Tonnety salió disparado el hombre-bala, describriendo un perfecto tiro parabólico, se le podía escuchar: "cagoendiosss" al tiempo que movía sin parar manos y pies intentado evitar un hostión seguro.

El pato divisó al hombre-bala y como buenamente pudo agarró su escopeta y apuntando sobre la mirilla disparó su arma, despidiendo 237 perdigones de puro plomo que fueron a parar sobre el cuerpo de su presa, cayendo esta sin vida al frio suelo del mes de enero de una mañana de domingo.

Recuperado el pato del retroceso de la escopeta y tras 23 vueltas de campana advirtió que había dado sobre el blanco, entonces agitó la última pluma de su ala derecha. En ese instante, siete tigres siberianos comenzaron la carrera hacía lo que quedaba del pobre hombre-bala. Seis de ellos desgarraron su cuerpo y se dirigieron a su amo, el pato, para presentarle sus respetos y la muestra de su certera punturería.

Rezagado el séptimo tigre y al llegar sin brazos, ni pies, ni cabeza, ni...nada, miró a su dueño y sin mediar palabra, abrío su enorme boca y se tragó al pato.

Sorprendidos los seis tigres, uno de ellos se alzó sobre sus patas traseras, encorbado y meneando sus garras al estilo italiano, de lo que serían sus brazos, increpó a Tigretón (el séptimo): "Cobarrrrderrr, pecadorrrr, fistro diodenal, te has zampado al pato". A lo cual Tigretón respondío: "Por la gloriademimadrrrerr, se me olvidaba la naranja, !ñamm!"

miércoles, 2 de diciembre de 2009

El peso de las palabras

"He vuelto para quedarme, no te voy a dejar jamás".

Un poco antes de decir "Adios, lo siento, es que no doy para más".



lunes, 15 de junio de 2009

Duelo a muerte

Ahí estabamos los tres. O mejor, aquellos dos y yo. Les miré a los ojos y sin dudar supe que era mi último combate. No levantan más de medio metro del suelo pero esta noche iba a morir.

Intenté defenderme como pude, lancé ráfagas de fuego por la boca y mi cuerpo se retorcía alejando dientes, garras y plumas.

Sentí un dolor insoportable en los ojos y comenzaba a desgarrame por el costado sintiendo como pequeñas cuchilladas.

Tumbado en un gran charco de sangre fuí consciente del suspiro con el que deje de ser, al tiempo que aquel pato y aquel puto gato crecían, crecían y crecían.

martes, 12 de mayo de 2009

Antonio Vega.

Una décima y chica de ayer son mis dos canciones. Cualquier de las dos hoy me harían llorar, ayer hacían sentirme bien.

No conocí a Antonio Vega pero algo en sus canciones hacía que me sintiera próximo él, comprenderlo y respetarlo. Antonio Vega era sensible y sensibilidad era lo que transmitía en sus canciones.

Escuchar a Antonio Vega me retrae al pasado, cuando pensaba que una canción podía llenar toda una vida. Hoy esa vida se ha parado y posiblemente aquella otra, la mía, ya no me parezca tan llena.

Imagino que ahora descansarás. Te echaré de menos.

miércoles, 15 de abril de 2009

Confundido

Ando atascado en "todo fue un gran error", he paseado, navegado y leeido buscando a mi Musa.

Pensaba que todo fue un gran error podría ser el comienzo de una historieta macraba con final "no feliz", pensaba que las palabras se enlazarían y crearían, pero no.

Tampoco "ando atascado" es un buen principio. Oipicnirp nueb nu se "odacsata odna" ocopmaT.

No parece que no. On euq ecerap oN.

No, no y no.

viernes, 27 de marzo de 2009

Ahhhh, que gustito!!

Ehhh, uhhh, si, parece que si.
Ahhh, que gustito. Mis dedos teclean en creación de entradas.
Y ahora qué. Despertar al letargo, no va a ser fácil.
Espero volver con asiduidad.