viernes, 23 de diciembre de 2011

Vamos a jugar.

Los tres, vestidos de traje negro en los vértices de un triángulo equilátero se miraban fijamente a los ojos. Se apuntaban con sus Magnum 45 cada uno al entrecejo de su openente izquierdo. Impasibles dejaron pasar el tiempo, ¿quién sería el primero en disparar?

Parecía que nadie iba a comenzar, cuando los tres, al mismo tiempo, alzando la vista y cada uno en la misma dirección, advirtieron que otros tantos, vestidos con trajes azules les apuntaban con nuevas Magnum 45.

Esta imagen se repitió en infinidad de planos y distancias solo variando el color de los trajes. Ahora sí que sería divertido disparar. Se escuchó un primer disparo seco "pum", después todos, uno tras otro, en un ruido ensordecedor, fueron cayendo en un dominó tridimensional.

jueves, 24 de noviembre de 2011

Cuidado por donde andas.

Salió del hotel antes de cenar. Llevaba varios días en la ciudad y por fín disfrutaba de un poco de tiempo libre. Había decidido conocer las calles del centro histórico. Pensaba que no había nada mejor que viajar y conocer el mundo para derribar esos prejucios sobre los demás que son causados por la ignorancia y el desconocimiento.

Inició su paseo. Abundaban los edificios de piedra, estaban recien restaurados y le parecieron preciosos. Tenía otra idea de la ciudad donde se hospedaba.

Siguió caminando y sin darse cuenta se perdió por un entresijo de calles estrechas. Pequeñas tiendas y bares con cierto gusto ocupaban los bajos de ambos lados de la acera. Cada vez era menor la luz que alumbra su paseo y en pocos metros tiendas y bares desaparecieron. Tampoco vió a nadie alrededor y el más absoluto silencio le envolvió.

Comenzó a preocuparse, a izquierda y derecha no veía más que calles cada vez más estrechas, solitarias y silenciosas. Hecho a correr, pensó que de esta manera saldría antes de aquella pesadilla. Pero pronto paró, notó que no eran las calles las que se estrechaban, eran los edificios los que se movían y se acercaban. Paralizado, no pudo evitar que en pocos segundos la presión que ejercían los muros contra su cuerpo le llevaran a dejar de respirar a morir, allí, de pie.

lunes, 10 de octubre de 2011

Lo que puede llegar a pasar

Dejó de leer y se quedó sin Historia.
Dejó de escribir y no supo leer.
Dejó de cultivar la amistad y se quedó sin amigos.

domingo, 3 de julio de 2011

Me salvé por los pelos.

Era una noche de tormenta (como la de ayer), las luces de los relámpagos seguidas de un atronador ruido habían conseguido varías veces despertarme de mi poco profundo sueño. Después de uno de aquellos, sonó el timbre de la puerta; una, dos...hasta cinco veces. Tuve que levantarme sino quería que despertaran a todo el vecindario, pero antes de abrir eché un vistazo por la mirilla.

Si quereis que os diga la verdad no me sorprendió lo que ví al otro lado. No eran pocos, estaban allí todos aquellos a los que durante estos años he dado muerte en los relatos de este blog.

No les podía negar la entrada, al fin y al cabo, formaban parte de mi pequeña historia. Uno a uno fueron pasando, les fui acomodando en el salón. Una vez que todos tomaron asiento, noté al más alto con ganas de intervenir y le pregunté: "¿Qué haceis aquí?"

"Bueno... Hemos hablado de la posibilidad de que tú compartieras con todos nosotros el dolor y soledad a la que nos condenaste. Es por esto que estamos aquí. Como puedes ver, hemos traido las armas y demás utensilios de matar, todos aquellos que un día tu imaginaste. Empezará el chico joven que tienes a tu lado. Esperamos que te duela."

No sé de donde saqué las fuerzas pero con un tono amable le contesté:"Oye, que esto no tiene por que acabar así. Ahora mismo cojo el portátil y esto lo solucionamos. A ver...nada...que me pongo. Supongamos una historia... como esta (tecleaba a toda velocidad)... Habéis venido y con toda razón queréis venganza. Habéis sido educados y no tengo nada que reprocharos (sigo tecleando), pero amigos, tengo que deciros y quiero que sepáis que sois la parte más importante de mi pequeña carrera de escritor mediocre, os lo debo todo (echaban humo las teclas). Habéis sido capaces, de que por unos instantes, me creyera creador y relator de breves historias... de vuestras Historias. No sois lo más importante, chicos, sois los verdaderos protagonistas. Por favor, iros en paz...Y se fueron (dejé de teclear)".

Bueno...me volví a la cama. Seguía lloviendo.

martes, 14 de junio de 2011

Tengo que descansar

Cuando uno se centra en su trabajo termina perdiendo la perspectiva. Cuántos, a cuántos hombres he quitado la vida, diez quizás veinte. Cierro los ojos y mi mente los confunde. No, ahí están todos ellos en un solo cuerpo, su único brazo se alza y armado con una enorme hacha, esta, destroza mi cabeza.
Nada ha merecido tanto esfuerzo.

lunes, 18 de abril de 2011

Escribir es un placer.

Me había sentado frente al ordenador. Había llegado a casa con ganas de follar.
Las ideas iban conformando un pequeño relato. Allí estaba ella, medio desnuda.

Comienzo a teclear, todo parece claro. Los dos, sin ropa, miradas con complicidad.
El relato ya tiene cuerpo. Pasamos de las caricias y comenzamos a sudar.

Me pierdo con las palabras pero no me desvío en la trama. Por fin llegamos a esa postura que nos hace disfrutar.

Si, todo controlado veo el final de mi historia. Si, si, si...el final ya está aquí.
Ahhhhhhh...Otra vez, hemos llegado juntos los tres; ella, yo y mi relato.

domingo, 3 de abril de 2011

En mi barrio hay tranvía

Voy a estrenar el tranvía. Espero en la parada, el display avisa, "quedan 15 segundos". Si, ya lo veo llegar. Para y se abren las puertas, qué curioso, está vacío y nadie sube conmigo. Tomo asiento justo en frente.

Pasan otros 15 segundos y miro al conductor; "vaya, no hay", "debe ser de estos modernos". Nada, que sigo, se aproxima la primera parada, no veo a nadie, el tranvía no para. Bueno, mi parada es la sexta.

A esto que noto como que se va acelerando, vamos, que se pone a toda ostia. Joder, las paradas pasan; segunda, tercera, cuarta, quinta (dios, la siguiente es la mia, que esto pare). Si, recuerdo haberlo visto en alguna película, seguro que acabo empotrado contra una pared o destrozado en un choque frontal con otro tranvía o autobús o "quemeseó".

Pero...un momento, se está parando, que si. Mi parada, he llegado. Tres minutos, "Valdespartera-Gran Vía", !!! en tres minutos!!!. Se vuelven abrir las puertas y ahí está, el Alcalde y el Presidente de nuestra Comunidad, se acercan, estrechan mi mano y me cuentan "Bienvenido al tranvía, es usted el pasajero número uno"

sábado, 2 de abril de 2011

Callejón sin salida.

En toda situación de crisis existen dos posibles salidas. La de luchar y cambiar el curso de la Historia o la de defender tu "status quo" y con ello perder toda esperanza de cambio.

Creo que la civilización occidental ha optado por esta segunda vía. Quizás sea el momento de los pobres.

domingo, 27 de marzo de 2011

No sé

Con esfuerzo sobrehumano me acerco al portátil e intento teclear una secuencia de palabras inconclusas. Son mis pensamientos los que fluyen, ayer se me olvidó escribir.

jueves, 10 de marzo de 2011

No es oro todo lo que reluce

Salí a trabajar. Cogí el coche, era temprano y una densa niebla me acompañaba por todo el camino. Unos kilómetros más adelante la niebla no me dejó ver.

El coche pareció parar al mismo tiempo que se elevaba. En un instante un sol explendido eliminó todo resquicio de nube.

Pude ver al frente diez, doce quizás veinte mujeres desnudas que se acercaban. Una de ellas llegó hasta mi y me invitó a salir del coche. Me dió la mano y me llevó con sus compañeras.

Hice lo imposible, miento, lo posible por que me quitaran la ropa, en un segundo me quedé desnudo. Poco a poco sus dedos fueron tocando todo mi cuerpo hasta que fue atravesado por afiladas dagas que me hicieron no volver nunca más a mi casa.

Había sido vengado por todos mis pensamientos lascivos.

domingo, 6 de marzo de 2011

Soldado Imperial


Nuestra historía comienza en la séptima luna del planeta EK-234, perteneciente al sistema solar Casandra, en una galaxia no muy lejana. Poblada por colonos venidos de distintos puntos del Universo, en la luna Eon, vivía Kerpu.

Kerpu trabajaba de sol a luna, 35 horas al día con pequeños descansos que hacían un poco más llevadera su penosa jornada laboral. Empezó con 18 años, pasó de tareas manuales a picar roca con ayuda de herramientas mecánicas. Toda la luna dependía de esta extraordinaria explotación minera. El Caudillo del satélite nogociaba a buen precio un raro mineral que el Imperio necesitaba como aditivo al combustible de su flota espacial.

Como consecuencia del nuevo tratado entre el Caudillo de Eon y la Delegación del Imperio, Kerpu sin otra opción, había sido obligado a enrolarse en el Ejército Imperial. Allí tuvo que dejar a su familia y amigos, y entre ellos, una amiga especial, Merfi.

Fueron unos meses de duro entrenamiento sometido a todo tipo vejaciones físicas y psicológicas, pero pudo afrontarlas gracias a la correspondencia que mantenía con Merfi, ella y su esperanza en reencontrarse, eran lo único que justificaba levantarse todos los días y seguir adelante.

Terminada la instrucción militar, Kerpu, tuvo que elegir destino. Era imposible su vuelta a Eon. Entre los compañeros se hablaba de un gran proyecto del Imperio, La Estrella de la Muerte, pieza imprescindible para poder terminar con la Alianza Rebelde. En poco tiempo fue ascendido a artillero de perímetro.

La Alianza, en su táctica de guerra de guerrillas, pronto había logrado pequeñas victorias que le hacían cada vez más poderosa. Sobretodos, eran conocidos Luke Skywalker y Han Solo dirigidos por una mujer de extraordinaria belleza, la Princesa Leia.

Llegaron noticias de un inminente ataque a la Estrella de la Muerte. Todavía no al 100% de su potencial, el colosal proyecto del Imperio era vulnerable. Recibieron la ayuda del sith Darth Vader, mano derecha del Emperador, con el objetivo de frenar los ataques rebeldes.

Poco tiempo duró la defensa de La estrella de la Muerte, todos conocemos como acabó. Kerpu murió y al poco tiempo, otra ofensiva de la Alianza destruyó el satelite Eon como estrategía para reducir la capacidad de la flota Imperial, y con el, Merfi.

Dos vidas rotas, entre tantas.

lunes, 28 de febrero de 2011

Por fín ya no soy nadie

Poco a poco se iba despertando, la anestesia perdía su efecto.
Alguien entró en la pequeña habitación, se acercó y fué quitándole las vendas que cubrían su cabeza.
El cirujano que le había operado comentó: "Ok, todo correcto. Todo ha salido perfecto. No podrá mirarse al espejo, no tiene rostro, por fin ya no es nadie. Lástima que no sea consciente de su último deseo".

lunes, 21 de febrero de 2011

!!Quién soy!!

En los últimos doce meses lo había intentado todo. En su búsqueda de la eterna juventud se operó los pechos (dos), glúteos (también dos), costillas (si, dos, extraídas). Se estiró lo inestirable y se empachó de botox.

Consiguió que la gravedad no ejerciera sobre sus dones naturales su irremediable efecto, aunque posiblemente tampoco se miró con detalle al espejo. No era más que una amalgama de carne orientada hacia arriba y una especie de rostro y cuerpo difuso.

No tuvo bastante, le hablaron de una crema que contenía el principio definito, el no vá mas dentro de los no va mases. Lo anunciaban por televisión, en la teletienda. No tendría más que llamar y acabar con lo poco que le quedaba en su maltrecha tarjeta de crédito.

Apenas en una semana recibió en casa su "poción" mágica. Debía de aplicarla por todo su cuerpo, el efecto, decía, era inmediato. Y así lo hizo. Se quedó desnuda y restregó sobre su cuerpo todo lo que el frasco contenía.

En sólo unos segundos notó sus efectos, sentía como su piel rejuvenecía, cambiaba de color. Era increible. También notó, y esto ya no le entusiasmaba tanto, que de sus ojos se proyectaban dos enormes apéndices alargados. Al abrir la boca, su lengua, se partió terminando en una bifída prolongación de esta. De su espalda, con gran dolor, asomaba una aleta desagradable y asquerosa.

Horrorizada y antes de perder la vista por completo, leyó el prospecto que incluía la pequeña caja en la que le habían envíado su deseada crema. Contiene: "baba de caracol, extracto del veneno de la serpiente más venenosa jamás conocida y escamas de aleta de tiburón ciego".

Evidentemente nunca volvió a salir de su casa.

domingo, 20 de febrero de 2011

Perder la vida

Tenía un amigo que siempre había dicho que tanta tontería en este país se terminaría con otra guerra civil, hacía falta orden y disciplina. El se apuntaría el primero.

Dicho y echo. Hubo guerra civil. Su mujer fue violada y después asesinada. Su hijo murió por el disparo de un francotiradador. En un bombardeo nocturno sus padres fueron aniquilados.

No sé como acabó aquella guerra, ni al final qué fue de mi amigo, pero estoy seguro que hoy, se arrepentiría de sus palabras.

viernes, 18 de febrero de 2011

No veo

Asomado a la ventana he de deciros que no me ha gustado lo que he visto.

Obscuridad. He vuelto a abrir los ojos.... obscuridad.

Se escapan

Cansado, de nuevo he llenado mis manos con todos los pequeños recuerdos que una vez me hiceron feliz. He intentado lo imposible por retenerlos, pero uno a uno han ido desapareciendo.

Otra vez me he vuelto a quedar sin nada.

jueves, 17 de febrero de 2011

Dicen que la droga mata

Tenía más de una semana por delante para acabar con todo. Le pidió a un amigo las llaves de su casa en la playa sin dar muchas explicaciones. Cogió el coche y no tardó en llegar.

Había pensado que la mejor forma sería atiborrándose de aquello que un día probó y le gustó. Por qué no. Tuvo que hacer unas cuantas llamadas pero al final consiguió todo lo que se propuso. Cocaina, ácido, un poco de heroina y todo regado con abundante "maría". Se había gastado todos los ahorros, tenía para más de una semana, no se iba a "pribar". Pensó también en compañía femenina y con el se llevó la guia de contactos de todas las páginas webs que pudo encontrar.

Al llegar a la casa dispuso todo el material sobre la mesita de la sala. Era una persona ordenada y así lo sería hasta el final. Quería comenzar con buen pie y se preparó su primera rayita. Billete y tarjeta, inclinó la cabeza y esnifó de una sola vez todo lo que pudo. En un instante notó que no se encontraba bien. Lo que tenía que haber sido un subidón directo se convirtió en un desagradable picor por todo el cuerpo, sintió que se quemaba a la vez que era consumido por lo que parecían millones de pequeños insectos. Poco disfrutó.

Pasó la semana y al no tener noticias de su amigo, el dueño de la casa pensó que lo mejor sería pasarse por allí. Así lo hizo. Entró en el pequeño apartamento y le sorprendió lo que vió sobre la mesita de la sala. No había rastro de su amigo, quizás lo esperaría pero mientras, joder!!, se iba a poner a tono. Otra vez billete, tarjeta...

Al poco tiempo un amigo en común al no tener noticias...

Y así fué como me quedé sin amigos y al no saber de ellos...

domingo, 16 de enero de 2011

Soledad espacial

Nació de una enorme explosión estelar. Apenas, unos átomos, condenados a girar en órbita elíptica dando vueltas y vueltas y vueltas.

Solo una vez, cada cien millones de años, la gravedad le permitía viajar próximo al último anillo de un gran planeta.

Acercándose a este, comenzó a notar como sus electrones saltaban como locos, alargando sus cuellos intentando no olvidar este único encuentro.

Nada, en apenas unos segundos, aquel último anillo se perdió y enfrente pudó observar el vacío. De nuevo, soledad.

domingo, 9 de enero de 2011

Esto es lo que les dije a pim, pam, pum

No eres el puto lider de la manada. Tu saxo tenor suena hueco, el piano no es cristalino y el bajo y violonchelo no saben qué es un acorde, para no hablar de la batería de los cojones, siempre a su bola.

Una voz y un cuerpo como el mio no pueden pertenecer a una banda como esta.

viernes, 7 de enero de 2011

Irregularidades

Estaba claro que hoy se había levantado con el pie izquierdo, sobre todo porque la faltaba la pierna derecha. Como pudo se incorporó de la cama y, cojeando, se acercó al cuarto de baño.

Preparado para lavarse los dientes, se percató que en lugar de estos, sobresalían de su boca unos pequeños ojos azules. "Bueno", pensó.

Terminada la limpieza bucal, abrío el grifo de la ducha y se quitó la ropa. Tres hermosos pechos y dos portentosas zonas genitales lucían su cuerpo casi perfecto. Esta vez evitó pensar.

Se metió en la ducha y descubrió con gran alborozo que en vez de agua caía vino, si vino. No lo dudó y mientras se aseaba, echaba algunos tragos al estupendo caldo que emanaba.

Quizás, ya algo mareado, salió del cuarto de baño y se dispuso para vestirse. Abrió el armario y solo encontró minifaldas y camisetas escotadas. De la mejor forma que pudo conjunto aquello y salío de casa.

Esperó el autobús que le llevara al trabajo. Después de más de media hora de trayecto y de alguna que otra risa, llegó a su oficina. Se olvidó de las llaves en casa y llamó a la puerta. Al abrirse, una gran pancarta colagaba del techo; "SORPRESA". Allí estaban todos sus compañeros de trabajo y junto al jefe, estaba él.


lunes, 3 de enero de 2011

Que si, que nos vamos!!!!

Me acabo de encontrar con Alicia. Hace poco he hablado con Pocoyo y Bob Esponja. He llenado el depósito y el coche está preparado.
Destino, el país de nunca jamás.
Volvemos pronto.